sábado, 27 de septiembre de 2014



Con los puños apretados... salí a tu encuentro. Ya no estabas.
Eras como un tren al que ves salir mientras corres por el andén.
Ya no hay tiempo. Tiempo. Tiempo....
Veo partir a la máquina pero no te veo a ti.
Despedida frustrada. Abrazo vacío. Beso en el aire.
Ya estás lejos.

Lejos de mi y de todo. Creo que ni tú sabes a donde vas. Y tienes miedo.
También yo lo tengo.
Por si te pierdes. Si sufres. Si sientes.

Te deseo lo mejor. Juro que te lo deseo.
Te quiero tanto que... se me hará difícil no verte de nuevo.
Tengo tus fotos, si. Cierro los ojos y estás a mi lado.
Todo es reciente.
Deja que actúe el tiempo. Tiempo. Tiempo...

Maldito tiempoooo!!!!!
Que todo lo arrebata, todo revuelve, todo acelera cuando lo quieres lento.
Todo destroza. Todo arrastra. Todo mata. Todo.
Me rebelo. No lo acepto.
¿Qué gano? Nada.

Así que quedaré con la mano en alto, en un amago de despedida.
Prefiero siempre un ¡hasta luego!
Sabes que te quise. Sabes que te quiero.
Perdona si no te lo dije...

Hasta pronto. Cuídate. Cuídanos. Un beso.


( Gracias por hacer de mi, parte de lo que soy. Por no irte antes. Vete tranquilo. Reúnete con ella. No estarás sólo. )

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